Hoy es el Día internacional de los trabajadores, fiesta que reivindica en todo el mundo esa condición de la dignidad humana por la cual accedemos al sustento diario (que comúnmente llamamos PAN); por el cual nos realizamos como personas; testimonio único de progreso, crecimiento, de autoestima, valoración y ejemplo.
Pero este 1 de mayo tiene un sabor especial. Quienes han tenido la posibilidad de pisar «una cuadra» -lugar dónde todos los días del año (sin excepción alguna) se elabora el pan- saben qué, alrededor de esta actividad milenaria (ha sido el alimento básico de la humanidad desde la Prehistoria) se molda la esencia misma de la cultura del trabajo.
Y no es que otros trabajos lo representen en menor o mayor medida. Sucede que el del panadero, conjuga lo imprescindible de nunca poder faltar; lo constante de nunca poder detener su producción; lo previsible para ser el primero en llegar… y crearse cuando las ciudades, los pueblos duermen; y todo el esfuerzo, la dedicación y el amor que el arte de alimentar conlleva en sí mismo… Pareciera ésta la descripción del trabajo de una «ama de casa» ¡¿verdad?!… quien además, con la misma melodía, entona muchas otras tareas que le toca afrontar.
Hay imaginarios, cómo el del panadero, que han construido la «cultura de trabajo» lejos, muy lejos de la injusticia, la especulación, el chantaje, la avivada, el subsidio, la extorsión, la precarización, el abuso…
Es que las personas somos capaces de todo para que «nunca falte el pan»… Ojala, y en esta bisagra que parece ser el Bicentenario, también hagamos el esfuerzo para que «abunden los Panaderos»…
En homenaje a «Don Cañas», que desde ayer hornea trabajo, esfuerzo y amor en el Campamento Eterno… El más grande de los recuerdos y la dicha para Nati y su familia, por haber tenido en casa: UN PANADERO!
Ale, Ale:
Que palabras! Son tan fuertes, en el buen sentido. Escritas desde el corazón queriendo tender un puente en esta distancia que hay nos separa.
Gracias y mil veces gracias en nombre mío y de mi familia. Estoy escribiendo en medio de una vista nublosa y vidriada por las lagrimas.
Te he sentido muy cerca.
besos
Espero Nati, que encuentren PAZ y amor en familia.
Un beso grande
Ale, amigo, sos un ángel, te quiero un montón, espero que hayas pasado un excelente día del trabajador.
Aprovecho para mandarle un abrazo enorrme y mucha fuerza a Naty y su flia.
Gracias Jime… pero todas estas cosas lindas que me decís, no te exceptúan a que me hagas tío pronto… 🙂
Besote y saludos a tu chico (decile que te cuide!)
Ale, hermoso, con lágrimas en los ojos leo tu nuevo post. Me hiciste acordar a mi abuelo, y mis mejores vacaciones en la cuadra. No conozco persona que haya trabajado con tanto esfuerzo y dedicación hasta sus últimos días. Un verdadero ejemplo del trabajador.
Besos y saludos a todos los trabajadores
Qué lindo Romi… Las «cuadras» siempre me parecieron un lugar especial, místico… lleno de un espíritu único.. Me alegro haber rememorado entrañables recuerdos… Un beso enorme y feliz día!!!
¡Qué buena tu reflexión, Ale!. Desde el corazón comparto tus palabras y aquí estoy cerquita de la Nati para apoyarla cuándo lo necesite, pero tiene alma de panadero; tesón, voluntad y fuerza.
Un fuerte abrazo.
Marijó